10 palabras valen más que una imagen - 20240526223027

Desde niño me consideré una persona muy visual. Me gustaban los libros llenos de dibujos y portadas llamativas. Además, aprendí a dibujar y a expresar ideas con dibujos. Aprendí a expresar "más de 1000 palabras" de golpe con una imagen. Todavía al día de hoy, siendo ingeniero electrónico, sigo expresando ideas de trabajo con diagramas. Pero me di cuenta que la expresión visual limita la precisión con las que comunico algunas de mis ideas.

Al igual que con las palabras, el dibujo de diagramas implica el uso de un lenguaje. Por ejemplo, en ingeniería electrónica utilizamos un conjunto estándar de símbolos para dibujar un tipo de diagramas que llamamos esquemático de circuito (o simplemente esquemático dado suficiente contexto). Por ejemplo, este enlace te lleva a la descarga del esquemático de la tarjeta Beaglebone Black (una pequeña computadora utilizada frecuentemente para automatización industrial). Ábrelo.

A no ser que tu profesión o hobbies estén relacionados con ingeniería electrónica, no me sorprendería que el diagrama te resulte confuso. Y si te pido una descripción de lo que ves, muy probablemente será muy diferente de lo que su autor pretendía comunicar cuando lo dibujó. Además, si le pregunto a otra persona quizá me responda con otra interpretación diferente. En otras palabras, los diagramas requieren contexto para que sus expectadores puedan interpretarlos con precisión. El lenguaje visual de los esquemáticos es una jerga especializada que nos tiene que ser familiar antes de que podamos extraer información de dichos diagramas. Y, por lo tanto, necesitamos más contexto (o conocimiento previo) para una interpretación precisa de las ideas contenidas en el documento.

Otra forma cotidiana de notar la pérdida de precisión en la comunicación visual es la dificultad que tenemos describiendo o explicando imágenes. Al día de hoy estamos acostumbrados a mandarnos imágenes por el celular o la computadora (fotos, memes, diagramas, stickers, emoticonos, etcétera). Pero, irónicamente, nos parece difícil describir esas imágenes con palabras: ya nos acostumbramos a sacar el celular para mostrarle la imagen a la gente que tenemos cerca, o mandársela a quienes tenemos lejos. De alguna forma y hasta cierto grado, acostumbrarnos a un mundo visual nos ha adormecido nuestra habilidad de expresión verbal.

Hasta ahora parece que esto es una oda a la expresión verbal. Pero debo decir que el lenguaje escrito también tiene muchas limitaciones respecto a la precisión de lo que expresamos con él. Desafortunadamente, de hecho, es muy común que algunos autores escriban textos encriptados con jerga especializada que son ilegibles para su audiencia. Para que la expresión verbal sea precisa, tenemos que escribirla de forma sencilla. Escribir ideas complejas de forma sencilla es difícil, y escribir cosas simples de formas complejas es fácil. Si escribimos de forma clara y concisa, nos podemos expresar más precisamente con 10 palabras escritas que con más de 1000 en una imagen.

Para explorar más el arte de la expresión verbal, te recomiendo el libro "Writing to Learn" de William Zinsser. El libro, además de dar consejos para escribir claramente, da algunos ejemplos de autores que lograron expresar ideas muy complejas de formas que muchos puedan entender. Por ejemplo, William analiza cómo Albert Einstein explicó su teoría de la relatividad a la audiencia general en su libro "Sobre la teoría de relatividad especial y general".

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Términos clave: escritura sencilla, expresión clara, lenguaje visual

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